Panna cotta de chocolate blanco y limón
Fácil
Se obtiene: Recipe for 12 servings
Esta receta presenta un clásico de siempre servido en un plato de postre. Los sabores son chocolate blanco y plátano caramelizado. La piel de limón refresca el paladar. Una preparación sencilla que aporta grandes dosis de placer. Puede servirse con una cerveza blanca que realza las notas ligeramente ácidas para completar la experiencia sensorial.
Esta receta presenta un clásico de siempre servido en un plato de postre. Los sabores son chocolate blanco y plátano caramelizado. La piel de limón refresca el paladar. Una preparación sencilla que aporta grandes dosis de placer. Puede servirse con una cerveza blanca que realza las notas ligeramente ácidas para completar la experiencia sensorial.
Contiene: 3 Componentes

Panna cotta de chocolate blanco y limón

Ingredientes: Panna cotta de chocolate blanco y limón

  • 13.4 oz
    leche
  • 4 pieza(s)
    ralladura de limón
  • 2.1 oz
    gelatina rehidratada
  • 7.1 oz
    CW2NV
  • 13.4 oz
    media nata montada 35%

Preparación: Panna cotta de chocolate blanco y limón

Llevar la leche a ebullición, retirarla del fuego y añadir la cáscara de limón. Dejar reposar. Derretir el chocolate blanco, mezclar con la gelatina y emulsionar. Cuando alcance una temperatura de 35°C, añadir la nata. Repartir en copas individuales y dejar que tome consistencia enfriándose en el frigorífico.

Plátano caramelizado con vainilla y cilantro

Ingredientes: Plátano caramelizado con vainilla y cilantro

  • 4 pieza(s)
    Banana en rodajas
  • 14.1 oz
    azúcar
  • 7.1 oz
    nata
  • 1
    vaina de vainilla rallada
  • 2 cuchara(s)
    cilantro en polvo

Preparación: Plátano caramelizado con vainilla y cilantro

Llevar a ebullición la nata con la vainilla y el cilantro. Hacer un caramelo seco con el azúcar,
desglasar con la nata y añadir el plátano en rodajas. Cocinar hasta que el plátano esté blando, pero sin que pierda su forma.

Maridaje

Cerveza de trigo + chocolate blanco = un perfecto maridaje de sabores. Este postre tiene un equilibrio que desarrolla de forma ideal las características de la cerveza. El chocolate blanco, suave y cremoso, con limón y semillas de cilantro molidas son un excelente contrapunto para una Hoegaarden. Las delicadas notas de plátano de la cerveza se perciben de forma más directa, pero el sabor general sigue resultando fresco y equilibrado.

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